Presentación

El papel de los docentes en el sistema educativo de cualquier país tiene, en estos tiempos de auge de las TIC, indudable importancia y enorme dimensión. La responsabilidad social a la que deben responder los compromete a una continua formación académica y actualización constante. Por tal razón, a lo largo de más de 60 años, el Instituto Latinoamericano de la Comunicación Educativa (ILCE) ha puesto a disposición de los docentes un catálogo único de recursos para la enseñanza y trayectos formativos que se han distinguido por señalar, e incluso anticipar, los temas, aspectos y usos de tecnologías que se convierten en verdaderos modelos educativos. 

En esta ocasión, el ILCE presenta una nueva propuesta a los docentes de los diferentes niveles de la Educación Básica y de Media Superior. La hemos llamado Escuela de Verano para Docentes, ligando elementos que podrían considerarse excluyentes: Escuela vs. Verano (vacaciones). De esta aparente contradicción se desprende la posibilidad de que las actividades elegidas por los docentes para sus tiempos de asueto también contengan ideas y propuestas que amplíen las habilidades y capacidades de las que tendrán que echar mano para mejorar sus planeaciones y desempeños en el siguiente ciclo escolar.

 

Por lo anterior, en este año el ILCE ofrece su primera emisión de la Escuela de Verano para Docentes 2019, como un espacio que pone a consideración de los profesores una manera diferente de usar la tecnología para la interacción, la colaboración y la comunicación, en la construcción de nuevas habilidades, el fortalecimiento de las ya adquiridas y, sobre todo, el reconocimiento de las capacidades que han sido la base y fortaleza de su hacer pedagógico cotidiano.

 

En la Escuela de Verano, pretendemos que los docentes amplíen sus posibilidades de:

Diseñar situaciones de aprendizaje conforme al nivel, el contexto y los propósitos educativos.

Crear nuevos recursos didácticos con el apoyo de las TIC.

Incorporar, a partir de la búsqueda, selección y adecuación, recursos didácticos atractivos para el aprendizaje de sus estudiantes y eficientes para la enseñanza.

Usar de manera pertinente la tecnología disponible en su entorno, de acuerdo con el contenido y el contexto de sus estudiantes.

Compartir y reflexionar colectivamente sobre las mejores prácticas, experiencias y alternativas de solución a situaciones problemáticas en las aulas y con los estudiantes que atienden.